Dedicado a los viajeros, el modelo Overseas Tourbillon con su nueva caja en oro rosa 5N de 18 quilates se encuentra en perfecta sintonía con el tiempo actual. Encarna la modernidad y la excelencia técnica con su movimiento tourbillon calibre 2160 ultraplano, que cultiva la atención al detalle incluso en sus acabados más ínfimos. Gracias a sus correas/ brazaletes intercambiables, en oro rosa, piel de alligator y caucho, este reloj resulta adecuado para cualquier ocasión.
Espíritu viajero
El Overseas Tourbillon en oro rosa 5N de 18 quilates está impulsado por un decidido espíritu viajero, heredado de uno de los fundadores de Vacheron Constantin. Con la vista puesta en horizontes lejanos desde sus inicios, la Casa se encuentra presente en los 4 continentes ya desde el siglo XIX y nutre su expansión recorriendo distintas partes del mundo y mediante reencuentros emblemáticos que han ido marcando su historia. Aprovechando el impulso de esta dinámica, la Manufactura hace evolucionar constantemente sus modelos en función de las exigencias de sus clientes, tal y como se puede observar en esta nueva versión del modelo Overseas Tourbillon que encarna un estilo de vida moderno y resueltamente abierto al mundo.
Un diseño deportivo y elegante
Este nuevo modelo Overseas Tourbillon resulta elegante en cualquier situación. Un diseño sofisticado y elegante gracias a las líneas dinámicas y armoniosas de su caja en oro rosa 5N de 18 quilates y su bisel hexagonal, que sugiere la forma de la cruz de Malta. Reflejando un espíritu decididamente urbano, la preciosa caja de 42,5 mm aloja una emblemática esfera lacada en azul con acabado satinado con motivo rayos de sol. Además de su color intenso desarrollado específicamente para la colección, se distingue por la riqueza de detalles que lo componen: un acabado satinado con motivo rayos de sol acentuado por elegantes efectos de luz, horas índice y agujas en oro rosa 5N de 18 quilates, formando una combinación perfecta con los brazaletes/correas intercambiables. El reloj se puede llevar, según se desee, con un brazalete en oro rosa 5N de 18 quilates o con una correa de piel de alligator Mississippiensis azul o de caucho azul. Tanto la correa de piel como la de caucho se entregan con un cierre ardillon en oro rosa 5N de 18 quilates. No se necesita ninguna herramienta para realizar estos sencillos cambios. Este concepto de intercambiabilidad simple y fiable.
Calibre 2160
La búsqueda de la excelencia que impulsa permanentemente a los relojeros de la Casa les hace plenamente conscientes de los imperativos que debe cumplir un reloj. La pericia técnica y la precisión extrema son los denominadores comunes de este reloj, cuyo tourbillon anula mediante su rotación los efectos de la gravedad terrestre. Más allá de la sofisticación de este movimiento ultraplano compuesto de 188 piezas alojadas en un espacio de tan solo 5,65 mm de grosor, el espíritu de la colección se expresa de forma pragmática a través de una cómoda reserva de marcha de 80 horas y la útil presencia de un segundero pequeño en la caja del tourbillon. La pericia técnica también resulta evidente en los acabados del calibre. La caja del tourbillon, además de estar calada, incorpora una barra delicadamente biselada a mano, un trabajo que requiere casi 12 horas solo para esta pieza. En el borde del fondo de la caja, la masa oscilante periférica en oro de 22 quilates, decorada con motivos inspirados en la cruz de Malta, no solo realza la delgadez del movimiento, sino que también permite admirar la belleza de las piezas de acabado tradicional.
Classic with a Twist
La creatividad de Vacheron Constantin siempre se ha mantenido en sintonía con su tiempo evocando a la vez la memoria de la Casa. Este código de elegancia, adoptado por cada relojero, artesano y diseñador a lo largo de los años y los siglos, celebra el patrimonio y se atreve a explorar lo inesperado. Situado en la intersección entre el virtuosismo técnico y el refinamiento estético, el encanto imperecedero de los relojes de Vacheron Constantin consigue atravesar intacto las distintas épocas. Porque la intemporalidad no se consigue simplemente siguiendo las convenciones de la relojería tradicional, cada creación tiene un toque de audacia que se revela en los detalles más pequeños. Visualizaciones especiales, indicaciones descentradas, biselado específico de todas las piezas, acabado artesanal y la complejidad de un mecanismo son solo algunos ejemplos de esta pericia. Todo esto se traduce en un campo de expresión muy personal donde convergen la técnica y el estilo en una sutil armonía entre lo convencional y lo atípico.