Patek Philippe combina la Alta Relojería y la Alta Joyería reinterpretando su reloj de pulsera más complicado en una versión de oro blanco engastada con 118 zafiros azules (11,9 ct) y 291 diamantes baguette (20,54 ct), con «engaste invisible».
Entre sus 20 complicaciones, el reloj tiene cinco funciones sonoras, dos de las cuales son exclusividades mundiales patentadas: una alarma que suena a la hora programada y una repetición de la fecha que toca la fecha a voluntad.
La caja reversible de doble faz se distingue por su mecanismo de rotación patentado, que permite llevarla a voluntad con una u otra esfera a la vista.
Este reloj se entrega con unos gemelos de oro blanco engastados con zafiros azules baguette.
Patek Philippe en Miguel Muñoz.