Nuevo Coussin de Cartier
Para Cartier el tiempo es un terreno de juego. La posibilidad de explorar nuevos territorios y reinventar permanentemente la gramática estilística de la Maison. Este año, le corresponde a la forma cojín someterse a este ejercicio.
El reloj Coussin de Cartier está hecho para salir de noche y causar sensación. Este reloj es objeto de una colección compuesta por versiones de oro y diamantes, versiones bicolores y también versiones más experimentales, relojes flexibles y con pavé completo de piedras de colores o diamantes.
El reloj Coussin de Cartier es, ante todo, un cuadrado ribeteado con diamantes engastados en espiral. Todo radica en el volumen acolchado de la caja, con sus piedras de diámetros diferentes que acentúan el movimiento allí donde las aristas de oro depuradas y gráficas destacan el estilo. Esta sensación visual se apoya en los savoir-faire de la Maison. Una oportunidad que los talleres han aprovechado para inaugurar el engaste triangular que permite engastar los diamantes directamente en la caja sin recurrir a los granos tradicionales. El metal se eclipsa para revelar la belleza de la piedra y multiplicar su luminosidad.
Versiones bicolores que se atreven a invertir las piedras
En su versión bicolor, el reloj hace gala de la elección cromática de un dúo. Cartier elige dos colores para las piedras y se atreve a invertir su sentido. Diamantes y espinelas negras, turmalina Paraíba y tsavoritas, el pabellón se transforma en picot, un elemento decorativo. Una vez más, para los artesanos de la Maison se trata de un engaste innovador, minucioso y técnico. El resultado es impactante y tiene la textura de un reloj joya con personalidad.
Ediciones limitadas: versiones flexibles e innovadoras
El reloj Coussin de Cartier es también dos ediciones limitadas creadas por el laboratorio de investigación e innovación de la Manufactura Cartier. Un núcleo creativo que ha diseñado una caja sumamente flexible, sensible al tacto y con pavé completo de diamantes o de piedras de colores, esmeraldas, turmalinas, tsavoritas y zafiros.
Un reloj flexible compuesto por mallas de oro que se abrazan entre ellas para tejer un entramado cuadriculado en cuyo interior Cartier ha integrado un elemento innovador. Gracias a él, la caja se deforma y se vuelve a tensar para retornar a su forma original.
La dificultad de este trabajo, sin precedentes en Cartier, se multiplica debido a la gran variedad de diámetros y matices de las piedras. Un enfoque sumamente complejo, ya que el reloj es flexible y obliga al engastador a inmovilizarlo inicialmente con una resina para luego liberarlo.
La dificultad de este trabajo, sin precedentes en Cartier, se multiplica debido a la gran variedad de diámetros y matices de las piedras. Un enfoque sumamente complejo, ya que el reloj es flexible y obliga al engastador a inmovilizarlo inicialmente con una resina para luego liberarlo.
Cartier en Miguel Muñoz Joyeros.